27-07-2010

PURIFICACIÓN ENERGÍA FEMENINA 2010


La mujer ha de ser participe activa en el cambio que se está dando en el planeta. Ha de aprovechar este cambio para su regeneración, la regeneración de la energía femenina.

Hoy día hay diferentes organizaciones a lo largo del mundo, como son UNICEF, AMAM, ONG EQUALITY NOW entre otras, que están ayudando al despertar de la mujer, están ayudado a la liberación de la mujer, a que la mujer tome consciencia. Están ayudando a que la mujer salga del caos en que las diferentes culturas y religiones las ha introducido.

En pleno siglo XXI se sigue practicando la ablación en diferentes partes del mundo, en el que hacen sentir a la energía femenina impura y pecaminosa al no poder sentir placer en la unión en esa parte femenina.

Al igual que en algunas tribus del continente Africano, en el que al enviudar la mujer se la despoja de todo bien que tuviese en vida con el marido, dándole esos bienes a la familia del esposo y dejándola abandonada a su suerte con los hijos.

En diferentes partes del mundo se las secuestra, se las engaña, manipula y se las prostituye. Otra forma de vejación de la energía femenina es lo que ocurre con la violencia de género, así como la utilización obligatoria del burka, haciendo que la mujer se tape total o parcialmente.

Nos hacemos la siguiente reflexión ¿Qué de malo tiene el cuerpo de la mujer? ¿Por qué la mujer es inferior? Por qué se la coarta tanto? ¿Por qué se la limita? ¿Por qué tiene que esconderse? ¿Qué temor hay hacia la mujer, si a través de ella se extiende la vida?

Del mismo modo se está maltratando y prostituyendo al gran ser que nos acoge y alimenta, como es nuestra Madre Tierra. ¡Qué paralelismo!

¡Ya no más dolor, ya no sentir desmerecimiento, ya no mas escondernos como la energía femenina que somos! Bonita, intuitivas, creativas, generosas, compasivas, inteligentes… esos poderes de creación que nos ha concedido la Vida y el Amor, como la diosa que somos y que en ella tenemos que reconocernos.

Para que se realice la regeneración de la Energía Femenina, es necesaria la toma de consciencia del cambio que se está dando en todo el planeta.

Para que este cambio suceda en todo el planeta hay que entrar en el amor a uno mismo. Y para eso tiene que ser desprogramado todo el dolor, o todas las secuelas, o todas las grabaciones que haya negativas.

Para nada hablamos de la vanidad, que mucha mujer ha utilizado con sus formas, usando sus artes femeninas. También podemos coger las palabras, embaucadoras y seductoras. No es totalmente correcto.

Eso luego después ha tenido unas represalias; que en la Ley del Karma, igual ha sido castigo, doblegación, no reconocimiento de sus capacidades o energías. No todo tiene una misma línea recta.

Las mujeres han de empezar por ellas mismas; otorgándose ese poder, ese elixir de amor a uno mismo, respeto a uno mismo y reconocer en ellas mismas la inocencia, así como el poder de la Energía Femenina.

Y ahí tiene que entrar la energía del perdón, de redimir. Redimir a uno mismo.

La mujer como toma de conciencia, de sentir sus derechos, y para sentirse liberada es aconsejable que se ponga a trabajar en ella misma, realizando ejercicios de limpieza, armonización, tanto mentales, emocionales y físicos, para desprogramar todo el dolor que hay en ella.

La puerta para entrar en el amor y en la libertad, es hacerlo a través del perdón.

Es importante realizar ejercicios de perdón a uno mismo, para que el amor se pueda fundir, y pueda ir apareciendo el estado de gracia de esas energías en su máxima pureza.

Los siguientes ejercicios son muy aconsejables para la purificación de la Energía Femenina

Las mujeres que quieran ser partes activas en su sanación, que pidan ayuda por la noche a sus guías, y a los guías de la Divina Madre, “las huestes angélicas” para ser llevadas al Lago de la Verdad, a través del Rayo Azul, Blanco, Verde y Violeta y ser depuradas, comprendidas y respetadas.

Los siguientes decretos nos ayudan a grabar en positivo y así poder subir la vibración y permitir que entre la energía Acuariana.

Es recomendable hacerlos durante el día, repitiendo cada uno tres veces seguidas.

YO SOY el perdón actuando en todo mi sistema mental, emocional y físico; equilibrando mi energía femenina.
YO SOY el amor.
YO SOY la gratitud de ser mujer
YO SOY la belleza del amor
YO SOY la claridad y la sensibilidad
YO SOY la inocencia de sentir placer en mi cuerpo físico
YO SOY la inocencia en todo lo que pienso y siento
YO SOY el amor y el pendón en todo lo que pienso y siento
YO SOY la resurrección y la vida
YO SOY poder en equilibrio perfecto
YO SOY el poder en mi vida
YO SOY el amor y la alegría en ser energía femenina

Los ejercicios y decretos es recomendable realizarlos dos meses seguidos y descansar uno, volviendo a retomarlo después de la misma manera.

UNICEF
www.unicef.es/contenidos/399/index.htm

ASOCIACIÓN DE MUJERES ANTI-MUTILACIÓN EN ESPAÑA
http://www.amam.es/index.html

ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL EN LA LUCHA POR LOS DERECHOS DE LA MUJER Y CONTRA LA VIOLENCIA Y DISCRIMINACIÓN DE GÉNERO
http://www.rtve.es/mediateca/videos/20100206/documental-producido-equality-now-africa-rising/686801.shtml

26-07-2010

SACERDOTISAS Y CHAMANAS


Una mujer que toma conciencia de su ciclo y las energías inherentes a el, también aprende a percibir un nivel de vida que va más allá de lo visible; mantiene un vinculo intuitivo con las energías de la vida, el nacimiento y la muerte, y siente la divinidad dentro de la tierra y de sí misma. A partir de este reconocimiento la mujer se relaciona no sólo con lo visible y terrenal sino con los aspectos invisibles y espirituales de su existencia.

Fue a través de este estado alterado de conciencia que tenía lugar todos los meses que las chamanas/curanderas y más adelante las sacerdotisas, aportaron al mundo y a su propia comunidad su energía, claridad y conexión con lo divino. La curación, la magia, la profecía, la enseñanza, la inspiración y la supervivencia provinieron de su capacidad de sentir ambos mundos, de viajar entre los dos y de llevar sus experiencias al otro.

El incremento del dominio masculino en la sociedad y la religión hizo declinar la posición de la chamana y la sacerdotisa hasta tal punto que los hombres terminaron por adoptar sus roles.
El papel de la sacerdotisa fue tan fuertemente reprimido que la actividad de la mujer en la religión estructurada terminó por desaparecer por completo; lo que si consiguió perdurar de un modo "clandestino" fue la posición de adivina o bruja, que se convirtió en el último vínculo con las primitivas religiones matriarcales. La hechicera de la aldea era una experta en la magia de la naturaleza, la curación y las relaciones entre las personas, y tenía la capacidad de interactuar con las estaciones, su propio ciclo menstrual y su intuición; ayudaba y guiaba a sus semejantes en lo concerniente a la vida y la muerte, actuaba como iniciadora y transformadora valiéndose de rituales de transición y dirigía ceremonias extáticas.

Estas mujeres simbolizaban el equilibrio de la conciencia y las energías femeninas dentro de una sociedad y una religión dominadas por hombres, pero como desafortunadamente estos poderes representaban una clara amenaza para la estructura masculina, durante la época medieval se las persiguió sin tregua hasta virtualmente destruir la tradición de la bruja o hechicera en la sociedad.
Al atacarles, los perseguidores no hacían otra cosa que admitir su poder, pero no fueron esas agresiones las que finalmente destruyeron la brujería: fue el hecho de que con el paso del tiempo la sociedad terminó por negar la existencia de estos poderes femeninos. La bruja se transformó entonces en objeto de mofa: comenzó a aparecer en los cuentos infantiles e inclusive, durante la víspera de la celebración de Todos los Santos (Halloween), como una figura cómica.

Lamentablemente los primeros castigos que se les impusieron cada vez que eran capturadas, así como el miedo y la vergüenza que posteriormente provocó su imagen, hicieron que la mujeres dejasen de expresar aquellas habilidades y necesidades que habrían supuesto el resurgimiento de la tradición.
Los efectos directos de las persecuciones de las brujas todavía se perciben hoy en día: hacen falta enseñanzas espirituales, arquetipos y tradiciones que reconozcan la naturaleza femenina y sus energías, y demás está decir que ya nadie nos guía en su utilización....

Miranda Gray: Luna Roja, los dones del ciclo menstrual,

25-07-2010

CUENTO PARA NIÑAS-BRUJAS



En el monte llovía desde hacía 3 años.
Ninguno podía recordar los motivos, ni la noche exacta en que comenzó a llover, pero luego ya no pudo parar.
Con la lluvia fue enrareciéndose la aldea y nadie sabía qué hacer con tanta agua. Sólo la luna llena detenía las lluvias.

En la 5ta luna las plantas ya no daban frutos.
Los caminos se volvieron pantanosos.
Y un olor fétido comenzó a sobrevolar el monte.
En la 7ma luna llena se fueron los animales.

La gente, a pesar del agua, siguió viviendo allí, detenidos por la comodidad y la costumbre, esperando el día en que deje de caer.




Algunos sospechan que Anatilde tuvo que ver en todo esto,
y cuentan la historia de esta niña
que decidió renunciar a todo cuando comenzó a volverse mujer

Antes de la lluvia, Anatilde vivía en el monte.

El monte es húmedo con arbustos, matorrales y algunas especies herbáceas
El monte es oscuro, con tierras yermas, roquedos y arenales.

Todo en el monte ocurre en las sombras,
por la noche, o a la hora de la siesta.
Nada hay en el monte que las sombras no sepan.
Anatilde vivía en el monte.

(A la edad de 15 años comenzó su metamorfosis y con ella,
se desencadenaron los acontecimientos.)


El primer acontecimiento fue la llegada de tía Amanda, quien, a Anatilde, iniciaría a bruja.

Tía Amanda era la hermana de su madre. No tenía hijos y era la primera vez que venía a visitarla. Su madre decía que se había vuelto bruja y no quería volver a verla.

Tía Amanda era una mujer extraña, hablaba poco y sólo usaba ropas oscuras. Salía de la casa en horas extrañas y nadie sabía adónde iba.
La gente del monte la miraba con desconfianza, algunos con temor y otros con desprecio.

Cuando llegó, miró a Anatilde profundamente a los ojos, y desde ese día la nombró: aprendiz de bruja.







La iniciación

“Las brujas son mujeres sabias –le decía – y cuando una niña se inicia debe renunciar a 3 anhelos de mujer porque las brujas son mujeres solitarias, nocturnas y feas.”

La primer renuncia fue a la compañía humana; las brujas son mujeres solitarias, viven solas o con brujas hermanas, entre telas de araña y animales amigos.

La segunda renuncia fue a la luz del día: Anatilde comenzó a habitar en el universo nocturno, y dentro de él fue planeando tranquilamente su hechizo. Para llevarlo a cabo comenzó a campear de noche y volvía a su casa antes de la luz del sol, porque sabía que a las brujas las cuidaba la luna.
Salía a las 3 de la mañana y se ocultaba la cara con un pañuelo para no ser reconocida. Merodeaba por los alrededores de la aldea buscando manojos de cabellos, pedacitos de uña, restos de piel, cascaritas de lastimadura, escupidas, retazos de camisas o de vestidos o de pantalones, suela de zapatos, colillas de cigarrillo, botones, hebillas, monedas… Y cuando los encontraba los hincaba con una caña y los echaba a un jarrito.

En la 2da luna llena Anatilde tomó la pócima de las aprendizas de bruja para renunciar a la belleza. Con el correr de los días, comprobó que su nariz fue agrandándose, comenzaron a brotarle verrugas, sus dientes se aflojaron (algunos se cayeron). Sus uñas crecieron más de lo habitual, y se le extendieron los dedos, la espalda se fue encorvando y su mentón se hizo más agudo, el pelo reseco y la tez, pálida y en algunas zonas verdosa.
Para que la gente de la aldea no notara su transformación, comenzó a usar ropas anchas y oscuras y zapatos negros, largos y puntiagudos.






El hechizo

Cuando se cumplieron las 3 lunas, Amanda se fue de la casa.
Y Anatilde fue al monte.
Formó un gran círculo con hojas secas y las incendió. Poco a poco se fue formando un denso velo de humo. Anatilde se encontró en medio de una niebla de cenizas que flotaban a su alrededor y la escondía de las miradas curiosas de la aldea.

Encendió en el centro un pequeño fogón con ramas, sacó su calderito y vertió en él todas las cosas que había encontrado, lo puso al fuego y se puso a cantar. Mientras revolvía cantaba.

De pronto comenzó a levantarse un aire frío, de la tierra comenzaron a despegarse suaves nubes de polvo, las ramas de los arbustos se agitaron levemente, y levemente comenzó a llover…Y llovió, llovió, y siguió lloviendo, y estuvo lloviendo un largo rato, y llovía y la lluvia caía cada vez más pesadamente. Durante toda la noche llovió en el monte, hasta llenarse de agua toda la aldea, la tierra se fue haciendo un lodazal y en todos lados había charcos, y el agua seguía cayendo.

Y así vino lloviendo desde hace 3 años…

La gente de la aldea cree que Anatilde se fue con su madre apenas comenzaron las lluvias. Otros dicen que aun sigue allí, en su casa del monte, esperando terminar de ser niña, dicen que ya no es bruja, y que en unos años, una mujer descenderá del monte y cesará de llover.

Luisina Egidi

CÍRCULOS DE PODER



La práctica gregaria más antigua concentrada en el bien común, ha sido reunirse en torno al fuego. Esta dinámica incluyente ha permanecido como forma de consejo en muchos grupos indígenas y espirituales. Hace 30 años que lo retomamos los llamados “pequeños grupos de conciencia. Hoy se expande como la mejor manera de fortalecer vínculos y de tomar decisiones por consenso.

En el círculo se permite la expresión de puntos de vista diversos. Circula la energía de manera horizontal, la voz de las integrantes –equidistante del centro-, es escuchada por igual. Esta forma de reunión evoca la sinergia, la energía que es superior a las partes y que solo se crea cuando las partes se alinean en un mismo propósito.

Lineamientos para formar un círculo de conciencia con aplicaciones en la órbita personal y/o ciudadana.

1. Considerar el círculo un espacio sagrado
2. Respetar que una sola persona hable a la vez
3. Hablar y escuchar desde el corazón
4. Apreciar la diversidad de puntos de vista
5. Escuchar con discernimiento no desde el juicio
6. Compartir liderazgo y recursos
7. Decidir juntas sobre la manera de tomar decisiones
8. Favorecer el consenso para encontrar la voz común
9. Hablar desde la experiencia en lugar de ofrecer consejo
10. Recurrir al silencio, solicitar ser guiadas cuando se duda
11. Decidir juntas lo que será confidencial al círculo
12. Hablar desde nuestra experiencia nunca por las demás
13. Abrir y cerrar el círculo escuchando la voz de cada una.

LA GUERRERA ESPIRITUAL




Una Guerrera espiritual es alguien que ha comprendido que la principal batalla que hay que librar es contra los propios errores, y que la conquista más grande es la conquista de una misma. La vía de la Guerrera de la Diosa es el Amor, es la autenticidad, la fe y la perseverancia y el servicio.

la Guerrera de la Diosa, alcanza a través del amor, la sabiduría que pone fin a la insatisfacción y el sufrimiento.

La Guerrera espiritual debe cultivar su temple, enfrenta los miedos y temores, medita, aprende a navegar en el mundo pero no forma parte de él. Algo de lo que más valora la Guerrera espiritual es la Paz interior...

La Guerrera espiritual aprende de sus errores, refina sus relaciones con los demás y consigo misma apelando al amor y a la bondad que reside dentro de sí misma y de los demás.

Habla de corazón a corazón y sabe que no es mayor ni menor que nadie. Aprecia su cuerpo, su sexualidad y su feminidad.

Sabe que no hay peor enemigo que un ego que se desborda y que nada debilita tanto como la vanidad y la auto-importancia. Utiliza el discernimiento para abrirse camino aún en la confusión.

En la Guerrera espiritual alternan la sensibilidad y el coraje, con sensibilidad vive todas las situaciones, con coraje supera las circunstancias adversas, es una observadora diligente, supera las fascinaciones de la vida cotidiana y continúa caminando hacia su meta. Tratando de no contaminarse y de mantener su corazón y su mente limpios...

Aprende a considerar a los demás, pero no busca la consideración de los demás...

Cultiva la paciencia. No falsea los hechos.

Ruka Kuyen

Ruka Kuyen
Ceremonias Femeninas de Purificación en Castro